Perder peso durante el embarazo puede ser normal en ciertas circunstancias, especialmente en el primer trimestre. Algunas mujeres experimentan náuseas y vómitos intensos (conocidos como hiperemesis gravídica), lo que puede llevar a una pérdida de peso. Sin embargo, es importante que cualquier pérdida de peso significativa sea evaluada por un profesional de la salud para asegurarse de que tanto la madre como el bebé estén saludables. En general, la ganancia de peso adecuada es un signo de un embarazo saludable.